miércoles, 3 de octubre de 2012

483



"no puedo nena"
le dije y me aleje de sus brazos
replegué mi conciencia hacia adentro
y di marcha atrás
trepando por la enredadera
moviéndome por el pastizal.

subí por los árboles
y abrí la boca para beber
la  brisa de la primavera.

cerré los ojos fuerte
y sentí a la savia correr
presionar mis arterias
desplazando a mi sangre.

me perdí en el bosque
y escribí un poema en mi mente,
desesperado trate
de revivir sus recuerdos
de recordar su mirada
de mirarlo al espejo
de buscarme en su barba
y nada.

y ella ya estaba lejos
un punto lejos
y deseé con toda mi fuerza
que me comprendiera.

se lo dije sin decirle nada:

"te pertenezco
pero también soy árbol
pero también soy yuyo".

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