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1

la mano firme sobre
la mano pétrea que desata
el sentimiento eléctrico

cadencia vampiro ritmo
insoportablemente jazmín
verdes hojas
verdes ojos
perdidos
sangre color carmín
en un suceso inmenso
y desproporcional...

2

la ruta hasta las rodillas
recorrida de rodillas
hacia la guerra eterna
la virgencita en la capilla
llora sangre color carmín

y la vida válida
en tanto pelea suculenta

la desubjetivación necesaria
para la guerra intestina entre
mi raza y tu raza,

nuestra etnia y

nuestra tribu.

3

mirarme las dos manos
acá vestidas de mapa
mirarme las dos manos
las palmas de ambas
una al lado de la otra
vestidas de mundo

todo lo que cae dentro
es endogamia mística
y luz,
después
se hace carne y sangre
después de vestirse
la piel baila hasta siempre
dentro del vestido
rojo sangre
color carmín.

RIMA FÁCIL
LUGAR COMÚN

4

blanco jazmín
roja sangre color carmín
como mis dos manos siamesas
abro la ventana y siento
al viento bailar en las persianas

es ritmo en los pechos
es ritmo en los senos
es ritmo en los cielos

y sangre e los ojos.

5

las uñas demasiado cortas
brotan un sabroso dolor
que sabe a sangre
y quien sabe
que ya salió el sol dos veces,
y que los motores neumáticos
han comenzado a romper los recuerdos
cura para siempre sus heridas.

las veredas rotas
y las obras
las obras que nacen
a partir de nosotros

los obreros con las uñas cortas
el repique del taladro
doliendo en el anular

el hilito de sangre
que brilla desde la cutícula
hasta la punta del dedo.

6

electricidad
luz de luna
insasiable locura y arrojo
empresa y viaje

grito nuevo y silencio
juventud eterna en ti
juventud eterna en vos
soliloquio
épico y sentencioso
magnánimo final
virgen tribal y fuego
otoño nimio e intermitente oración
santos vestidos de oro
santos vestidos de bosque

beben tu sangre.

7

subís al monte
y dejas caer
bienaventuranzas sobre mi

tus manos nadando
y mis dedos perdiéndose
en tu espalda que existe
a partir de mis manos

los dedos abriéndose en flor
jazmín o cualquier otra.

8

hemos bebido demasiado néctar
brindado con demasiada sangre
hemos besado demasiado veneno
pero nunca
nunca morimos lo suficiente