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Hasta que un día el paisano acabe con este infierno

y haciendo suyo el gobierno por sólo una ley se rija:

o es pa' todos la cobija,

o es pa' todos el invierno.

-Arturo Jauretche

Los kilometros pasando
los primeros treinta kilometros
los barrios de nenes en ojotas
que comen pebetes de nada
y toman mate cocido.

los kilometros pasando
los primeros treinta kilometros
los guisos aguados,
los tintos en caja,
las tortillas de la estación
y mate cocido

los kilometros pasando
los primeros treinta kilometros
los kilomentros donde los Quilmes
muerden el hambre
y toman mate cocido

allí,
en medio de ese espacio gris y nebuloso
de fronteras desdibujadas y fiebre
el terror jacobino gestándose
como única promesa redentora
como violento mesianismo
y profecia autocumplida

allí
el terror jacobino
se pone en una bandejita de plástico
en una bandejita de plástico que cada vez
parece mas grande, mas vacía.

allí
tres hermanos comparten una mandarina
en una parroquia perdida
y muerden el hambre
y sueñan igual que todos nosotros

con cortar sus cuellos.

el terror jacobino aguardando
mordiendo el hambre
treinta y tres kilometros
tomando mate cocido.

no se de que pasado hablan
ni que es eso que quieren dejar por detrás
para mi todos ellos estan aqui ahora
con todos esos fusiles fríos contra la piel
porque cuando el pan duele
no se trata de mártires...
mártires somos todos
¡de heroes se trata!

cuando el pan duele
sólo el terror puede
domesticar a las bestias

no sé de que pasado hablan
ni que es eso que quieren dejar por detrás
yo los veo a todos aquellos otros
en esos patios de azulejos
tomando mate, soñando la guerra
fumando compulsivamente el otoño.
soñando la guerra que libere
a los que viven en los kilometros
pasando los primeros
treinta kilometros

La veo a ella soñando la guerra
a ella china
a ella india
a ella negra
cantando:

“En los fieros tiranos la envidia
escupió su pestífera hiel.
Su estandarte sangriento levantan
provocando a la lid más cruel”.
¿No los veis sobre México y Quito
arrojarse con saña tenaz?
¿Y cuál lloran, bañados en sangre
Potosí, Cochabamba, y La Paz?
¿No los veis sobre el triste Caracas
luto, y llanto, y muerte esparcir?
¿No los veis devorando cual fieras
todo pueblo que logran rendir?"

¡el terror jacobino en la Gaceta de Buenos Aires!
¡el terror jacobino cultivándose ahora mismo
en los kilometros dónde los Quilmes
paran ollas populares!

¡ellos buscan virreyes de todos los imperios!
nosotros solamente debemos recordar
por qué hicimos la revolución!

¡sanmartínrosasperón!

No les advertimos, sino garantizamos,
que lo último que escucharan
antes de perder sus cabezas
será la voz fantasmal y ferrea
eléctrica y argenta
de maria josefa sanchez de thompson
subiendo por diagonal norte
cantando esa canción
que ustedes mismos
no pueden cantar.

la violencia en las manos del pueblo,
no es violencia,
 es justicia.